A principios del mes de Agosto, la firma coreana nos presentaba la renovación de la que puede que sea su gama más característica de teléfonos, el Note 7. Para las personas que sean cercanas a este mundo de los smartphones, les llamará mucho la atención el nombre: Note 7, saltándose de esta forma el 6, que por orden sería el sucesor del Note 5 que nunca llegó al mercado Europeo. Según explica la propia Samsung, esto se debe a que al haber presentado este año su Galaxy S7, querían unificar sus dos gamas principales, la S y la Note, poniendo así mismo nombre a ambas. Un plan inteligente bajo mi punto de vista.
Pero vamos a ver que nos ofrece este terminal. Como ya sabemos, los Note siempre han sido como un modelo para los dispositivos que serán presentados al año siguiente, incorporando estos la última tecnología del mercado. Pero esta vez no ha sido del todo así, ya que este dispositivo cuenta con una tecnología muy similar al S7 edge, siendo muy pocas las innovaciones que presenta como vamos a ver a continuación.
En cuanto a hardware, el terminal posee el mismo procesador que el S7, el Exynos 8890, un octa-core compuesto por cuatro núcleos a 2,3 GHz y otros cuatro a 1,6 GHz. La memoria RAM también es la misma, unos 4GB que van más que sobrados para este dispositivo. Pero en cuanto a capacidades internas, ya la cosa cambia, presentándose este Note con un almacenamiento básico de 64GB y un máximo de 256GB, toda una bestialidad como podemos ver. Y si no te conformas con poder tener un dispositivo de tanta capacidad, incorpora la posibilidad de añadir una tarjeta SD de hasta 256GB, lo cual se había perdido en el Note 5.
Hablando de cámaras vemos que también son las mismas que las incorporadas en el S7: 12 Mpx para la trasera, con apertura f/1.7, y una delantera de 5 Mpx con la misma apertura que la trasera. Además de esto trae consigo el mismo procesado de imágenes que el S7, de esta forma, podemos decir que este dispositivo, al igual que el S7 tendrá una de las mejores cámaras del mercado.
El diseño es completamente continuista, como ya nos tiene acostumbrados Samsung. Mantiene un diseño prácticamente calcado al S7 edge, y es que sí, este nuevo Note cuenta con una pantalla curvada a ambos lados, siendo el primero en incorporar este diseño, ya que como recordaremos, el Note 5 contaba con pantalla plana y curva en la parte posterior. Estas curvas en la pantalla nos va a permitir tener las mismas utilidades que ya tenían los dispositivos edge, pero este Note 7 cuenta ademas con otra curva en la parte posterior, plenamente estética, que hace que el perfil del teléfono sea completamente simétrico. Otra característica propia de los Note con la que cuenta este Note 7 son sus grandes dimensiones, y es que en algún lado hay que meter la maravillosa pantalla de 5,7 pulgadas del terminal. 153,5 x 73,9 x 7,9 son las medidas que hacen que a pesar de la gran pantalla, no sea un terminal tan grande como otros Notes anteriores, pesando un total de 169 gramos, más que los 157 gramos del S7. Decir ademas que está disponible en cuatro colores: plata, oro, negro y un azul muy discreto y elegante.
En el terreno de la autonomía, el dispositivo cuenta con una gran batería de 3500 mAh, menor que la de 3600 mAh del S7 edge. Puede parecer mucha batería, pero si tenemos en cuenta la pantalla de 5,7 pulgadas con resolución QuadHD, es muy probable que se limite solo a un día de autonomía, como ya nos tienen acostumbrados todos los android, así que en este terreno pocas novedades podremos ver. Aunque para esos casos en los que la batería no nos llegue al final del día y no podamos recargar el terminal, Samsung ha mejorado el modo ahorro de batería, permitiendo incluso cambiar la resolución de pantalla, y bajarla hasta el simple HD, para que el consumo se vea reducido.
Si por algo se caracterizan los Note, que los diferencian del resto de dispositivos del mercado, es por su SPen, que nos permite utilizar el terminal como un buen blog de notas, aparte de muchas más utilidades. Poco han cambiado las funciones de este SPen con respecto al Note 5, las únicas novedades son la incorporación de un modo lupa, en la que al acercar el lápiz aumenta parte de la pantalla, y una especie de traductor instantáneo, con el que nos bastará con situarnos encima del texto para que lo traduzca. Pero la verdad es que es una herramienta muy útil, y lo digo por experiencia ya que yo mismo tuve un Note 4 y le di mucho uso a este accesorio.
En cuanto a novedades de este Note, se suma al carro del USB Type-C, que se ha convertido en el nuevo standard y que Samsung no había incorporado antes. Una decisión muy acertada para no quedarse atrás en el mercado. Incorpora la protección al agua y al polvo del S7, es decir certificación IP68. Y como gran novedad en el terreno de la seguridad, incorpora un escáner de iris además del sensor de huellas. Este escáner nos registra los ojos con su infrarrojo al lado de la cámara frontal, y los conocerá incluso en condiciones de poca luz. Es un sistema muy rápido, pero cuenta con el inconveniente de tener que deslizar el dedo por la pantalla después de desbloquearlo, lo que ralentiza un poco el proceso, pero supongo que lo eliminarán y lo pondrán más fácil, más directo.
Este gran terminal, saldrá a la venta el próximo 9 de septiembre, a un precio de 850 euros para el modelo de 64GB, sin tener confirmación aún de los precios de las distintas capacidades. Como vemos es un precio que supera con creces los precios de anteriores Note y que harán que nos replanteemos la compra de este dispositivo muy seriamente.
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